La Atlántida


Atlántida: Las islas atlantes son un conjunto de nueve islas; Cámiros, Cítera, Égina, Lesbos, Quío, Rodas, Salamina, Tálaso y Yáliso, gobernadas cada una de ellas por uno de los nueve hermanos Telquines.
En cada uno de estas islas viven, además de los Telquines, sus esposas y estudiosos de alguna de las nueve artes mágicas que en ellas se enseñan.
Este grupo de islas están siempre vigiladas y protegidas por diversos monstruos marinos, y tiene un difícil acceso ya que está protegida por una cúpula que cumple dos funciones; en primer lugar, absolutamente nadie que no sea bienvenido podrá ver las islas, pues esta cúpula crea una ilusión que las mantiene ocultas en el océano, y en segundo lugar, nadie puede traspasar esta barrera sin el permiso de uno de los nueve Telquines.

Clima: Las islas atlantes poseen un clima árido, donde apenas llueve y las temperaturas suelen ser muy altas. Los días son largos y las noches cortas. Apenas hay vegetación y los cultivos se mantienen gracias al sistema de regadío implantado por los Telquines.

Gobernadores: Los nueve hermanos telquines.

Población: Los telquines. Los sabios, antiguos aprendices que adquirieron el mayor nivel posible. Los aprendices, seleccionados de entre los jóvenes del reino para aprender una de los nueve conocimientos que imparten. Los esclavos, los verdaderos nativos de estas islas, de piel aceitunada y complexión delgada generalmente por la desnutrición. También viven aquí las mujeres de los telquines y sus hijos, así como las mujeres de los sabios y sus hijos.

Leyes: En estas islas tan solo hay unas pocas leyes no escritas pero cuyo incumplimiento puede llevar a un ser a su muerte.

  1. Ninguno de los secretos aprendidos en las islas han de ser jamás revelados.
  2. Solo los hombres pueden aprender las artes, pues las mujeres no son de confianza.
  3. Los hombres pueden casarse con cuantas mujeres deseen, pero las mujeres deben ser fieles a sus esposos.
  4. Toda decisión que pueda afectar de algún modo a la isla debe tener el visto bueno del Telquín que gobierne en la isla en cuestión.
  5. Todo habitante de la isla debe contar con el permiso del Telquín que la regente para comerciar con los conocimientos que posee.
  6. Ningún aparato electrónico o tecnológico puede ser sacado de la Atlántida.
  7. No se permite el matrimonio entre esclavos.
  8. Los aprendices deben de ser célibes hasta alcanzar el rango de sabios.
  9. Ningún extranjero puede quedarse en las islas durante más de veinte días sin el permiso de un Telquín, permisos que escasas veces dan, pues ha de ser de su propio interés la presencia de la persona para tal cosa.
  10. Nadie puede vivir en las islas sin el consentimiento de un Telquín, consentimiento que no se da a no ser que esta persona trabaje para los intereses de estas bestias marinas.
Costumbres: 

  • Una vez al año, cada Telquín elige, de entre los habitantes del reino, un aprendiz que se lleva a su isla para educarle en el arte que cada cual domina.
  • Semestralmente, cada gremio de aprendices decide quienes pasan al siguiente nivel, quienes quedan estancados y quienes son expulsados del gremio. Se hace una gran fiesta para esto a la que acude el Telquín de cada isla.

Regiones: La Atlándida es un grupo de nueve islas, y cada cual constituye una región.
Cítera

Cítera: Isla regentada por Anteo. Es una isla rica en minas tanto de cobre como estaño. Sus habitantes son hombres experimentados en el arte de la cartomancia, tanto de las rutas por tierra, como las rutas por mar, y los esclavos que trabajan las minas. También viven las esposas de estos hombres, y las de Anteo, y sus respectivos hijos. Hay un mercado especializado en la compraventa de esclavos de orden inferior así como de joyas de bronce, perlas, armaduras y cadenas.


Égina
Égina: Isla regentada por Argirón. En esta isla abundan los yacimientos de plata. En ella habitan maestros duchos en el conocimiento y estudio de los diferentes dioses griegos, así como sus esposas y las esposas del Argirón, sus respectivos hijos, y los esclavos que trabajan en las minas. Hay un mercado de esclavos de orden medio así como de joyas de plata y piedras preciosas (Rubíes, esmeraldas y zafiros)

Cámiros
Cámiros: Isla regentada por Atabirio. En esta isla abundan las minas de oro, es una isla bastante rica, en la que se sitúa un mercado de compraventa de joyas de oro y diamantes. Viven los maestros que estudian a los titanes, así como sus mujeres, las de Atabirio, sus respectivos hijos y los esclavos que trabajan las minas.  Para los esclavos, en este caso hay que ir al templo de Atabirio, pues los comercia él, así como todos comercian sus metales y conocimientos; en sus templos.

Rodas

Rodas: Isla regentada por Calcón. En esta isla viven hombres especializados en las diferentes ramas de la adivinación, sus esposas, las esposas de Calcón así como este. En esta isla no hay un lugar exacto de comercio, los adivinos cuyos servicios son requeridos son enviados por el telquín al lugar en el que se les ha reclamado.



Quío
Quío: Isla regentada por Crisón. En esta isla viven hombres especializados en las artes de la magia natural, sus esposas, las esposas de Crisón así como los hijos de estos y los esclavos. Al igual que en Rodas y en las islas restantes, no hay un lugar de comercio específico, si no que los maestros de este arte se trasladan para ejercer su arte en aquel que compre sus servicios.


Tálaso
Tálaso: Isla regentada por Damnameo. En esta isla viven hombres especializados en el saber de las criaturas que habitan en Delphos, sus esposas, las esposas de Damnameo así como los hijos de estos y los esclavos. Estos hombres, cuando se requiere sus servicios son quienes van para acompañar en las expediciones a Ítaca*, isla donde habitan las criaturas.

Salamina

Salamina: Isla regentada por Damón. En esta isla viven hombres especializados en la nigromancia, así como sus esposas, Damón, las esposas de Damón sus respectivos hijos y los esclavos. Al igual que en las anteriores islas, no hay un mercado concreto, si no que los sabios se trasladan para dar sus servicios.




Lesbos

Lesbos: Isla regentada por Escelmis. En esta isla viven hombres especializados en el arte de las pociones, así como sus esposas, Escelmis, las esposas de este, sus correspondientes hijos y los esclavos. En esta isla si que hay un mercado concreto de pociones.



Yáliso
Yáliso: Isla regentada por Lico. En esta isla viven hombres especializados en el conocimiento de los hijos del Caos, así como sus esposas, Lico, las esposas de este, sus correspondientes hijos y los esclavos de la isla. Del mismo modo, son los sabios los que suelen abandonar la isla, en este caso, para cuando se requieren sus conocimientos.



Estructura de las islas:

Todas las islas tienen una estructura similar. En ellas, se encuentra una gran ciudad, siempre a orillas del mar. Es una ciudad de aire futurista, con grandes edificios de hierro, donde habitan los sabios, y uno especialmente majestuoso, vivienda del telquín de la isla en cuestión. En las ciudades puede haber o no un enorme mercado, dependiendo de las artes que se dominen, y en aquellas en las que no lo hay, hay un gran templo, también de acero aunque de estructura griega, al que se acude a pedir los servicios que se requieren de los sabios en cuestión, lugar en el que se decide si se acepta el trato, o si se deniega. Además en estas grandes ciudades hay algo que no existe en el resto de las regiones de Delphos; nuevas tecnologías, que no están en venta, y tan solo disponen de ellas los habitantes de las ciudades, por no contar que todos los edificios de la ciudad cuentan con energía eléctrica, que en el resto del mundo solo pueden poseer aquellos con recursos suficientes para pagar tan escaso bien. Los esclavos privados de los sabios y de los telquines viven en sus casas, dentro de la ciudad.
En los alrededores cercanos de la gran ciudad, en ridículas viviendas semiderruidas, en contraste con la rica ciudad, habitan los esclavos encargados de mantener limpia la ciudad.
El resto de terrenos son enormes campos de cultivo y de cría, donde los esclavos de la isla obtienen el alimento necesario, que posteriormente reparte el telquín como cree conveniente, las grandes minas que los esclavos trabajan para obtener los minerales de los que los telquines precisan, además de varios pequeños pueblos dispersos, alrededor de unos diez, cuyo tamaño disminuye pero su riqueza aumenta a más cerca están de la capital, que es donde los maestros de cada arte van formando a los aprendices, que cuando aumentan de grado pasan al siguiente pueblo, teniendo como objetivo ser un especialista y llegar a vivir en la gran ciudad, claro que no todos consiguen pasar. Los que no consiguen pasar al siguiente grado son educados para servir de profesores a las nuevas generaciones en el grado anterior, y aquellos que son incapaces de aprender en el primer grado pasan a ser esclavos del pueblo.

PD: Para más información ver página sobre los telquines pinchando AQUÍ.

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